En el tratamiento de la diabetes mellitus (DM), la alimentación se constituye en uno de los factores determinantes para que el paciente logre controlar con éxito esta enfermedad crónica que aparece cuando el páncreas deja de producir insulina o el cuerpo pierde la capacidad de usar de forma eficiente esta hormona vital.
En ese proceso, uno de los principales desafíos que deben afrontar las personas con DM es ajustarse a un plan de comidas determinado, el cual corresponda a sus necesidades particulares y contribuya al manejo adecuado de sus niveles de glicemia (azúcar en la sangre).
Según la Asociación Americana de la Diabetes (ADA, por sus siglas en inglés), no existe un patrón de alimentación único para todas las personas con diabetes mellitus, lo que implica que la planificación de las comidas deba ser individualizada. Por tal razón, la terapia nutricional tiene un papel fundamental en el manejo integral de esta afección, en la cual cada paciente debe involucrarse de forma activa tanto en la educación y el autocontrol como en la planificación del tratamiento, de la mano de los profesionales de la salud.
Meriendas saludables
El primer paso para consumir meriendas saludables que representen un buen aporte nutricional para su organismo y que le ayuden a mantenerse dentro del rango deseado de glicemia (de 70 mg/dl a 100 mg/dl en ayunas) es saber escoger las opciones más sanas al momento de hacer mercado y, después, tomarse el tiempo para preparar e, incluso, empacar meriendas saludables para llevar consigo al salir de casa (y así evitar la improvisación y comer por fuera lo que le “toque”).
La ADA recomienda las siguientes opciones de merienda, según el porcentaje de carbohidratos que contienen:
Con menos de 5 gramos de carbohidratos
- Quince almendras (sin sal).
- Cinco palitos de zanahorias (zanahorias baby).
- Cinco tomates cherry.
- Un huevo duro.
- Una taza de rodajas de pepino.
- Una taza de ensalada verde, más media taza de rodajas de pepino y un poco de vinagre y aceite.
- Dos galletas saladas.
- Media taza de gelatina sin azúcar.
- Un palito de queso.
- Ocho aceitunas verdes.
- Dos cucharadas de semillas de calabaza o sésamo.
- Un cuarto de aguacate.
Entre 10 y 20 gramos de carbohidratos
- Un cuarto de taza de frutas secas (nueces, almendras, entre otras).
- Una taza de sopa de pollo, sopa de tomate (hecha con agua), o sopa de vegetales con una manzana o naranja pequeña.
- Un tercio de taza de pasta de garbanzos (hummus), más una taza de vegetales frescos cortados (ají verde, zanahorias, brócoli, pepino, coliflor, apio, entre otros).
- Un cuarto de taza de queso requesón (cottage), más media taza de fruta fresca.
- Cinco galletas integrales, más un palito de queso.
- Medio sándwich de pavo (un pedazo de pan integral, más dos onzas de pavo y un toque de mostaza).
- Media taza de ensalada de atún, más cuatro galletas de soda.
Por último, recuerde que incluir meriendas saludables dentro del plan alimenticio que hace parte de su tratamiento de diabetes mellitus le ayudará a lograr y mantener objetivos de peso corporal y de glicemia; así como retrasar o prevenir las complicaciones de la DM. Procure comer sus meriendas en un tiempo determinado especialmente para ello, evite hacerlo mientras trabaja frente al computador, ve televisión, lee, conduce o realiza otras actividades.
Referencias
Diabetes Journals – ADA [sitio Web]. Gestión del estilo de vida: estándares de atención médica en diabetes — 2019 [publicado en enero de 2019; consultado el 20 de mayo de 2020]. Disponible en: https://care.diabetesjournals.org/content/42/Supplement_1/S46
American Diabetes Association [sitio Web]. Meriendas [última revisión el 13 de mayo de 2014; consultado el 20 de mayo de 2020]. Disponible en: http://archives.diabetes.org/es/alimentos-y-actividad-fisica/alimentos/que-voy-a-comer/consejos-de-comidas/meriendas.html