El ejercicio físico arduo y constante permite, según una reciente investigación, desacelerar el envejecimiento natural de las células del cuerpo y retrasar al menos 9 años de la edad biológica en una persona muy activa.
Sí, correr por 30 o 40 minutos al menos durante 5 días a la semana puede hacer más lento el proceso de envejecimiento celular. La investigación que prueba esto describe cómo a través de una actividad física constante y esforzada, se desestimula el acortamiento de los telómeros, que son una especie de tapas protectoras situadas en los extremos de los cromosomas –estructuras ubicadas en el interior de las células, que contienen nuestra información genética (ADN)–.
Los telómeros funcionan de forma semejante a las puntas de plástico al final de los cordones de los zapatos, ya que impiden que se deshilachen los extremos de los cromosomas (que parecen hilos) y se peguen a otros. Los telómeros son determinantes en nuestra edad biológica, dado que su longitud se va acortando entre más años de vida tenemos.
¿Por qué envejecemos?
Cuando los telómeros se vuelven demasiado cortos, pierden la capacidad de proteger los cromosomas, haciendo que las células dejen de funcionar y mueran. Diversos factores de estilo de vida deficientes, a los que se suma la falta de ejercicio, también pueden contribuir al acortamiento de los telómeros, produciendo estrés oxidativo, lo cual incapacita al cuerpo para compensar el daño celular.
El estudio realizado por el Profesor Larry Tucker, del Departamento de Ciencias del Ejercicio de la Brigham Young University en Provo, Utah (Estados Unidos), reafirma y demuestra la gran importancia que tiene la actividad física en los seres humanos, no solo para prevenir y controlar diversas enfermedades, sino también –y en especial–, para protegerlos contra el envejecimiento celular.
Entre más ejercicio, mejor
Para lograr desacelerar el envejecimiento biológico, no solo se trata de hacer un poco de actividad física. La investigación de Tucker encontró que, comparando el caso de personas sedentarias con otras que eran moderadamente activas, la longitud de los telómeros no fue significativamente diferente. Mientras que en individuos con altos niveles de actividad física se evidenció una longitud de telómero que representaba una edad biológica de 9 años menos.
Para protegernos contra el envejecimiento celular, es entonces recomendable alcanzar niveles representativos de ejercicio físico. Treinta minutos diarios de trote durante 5 días a la semana se consideran altamente activos para las mujeres, mientras que 40 minutos de trote bajo el mismo esquema resultan ampliamente benéficos para los hombres.
